El Reporte de Heather Segunda Parte (El Informe de Heather Segunda Parte en España y Heather Report Part II en inglés) es el décimo primer episódio de la serie Dragones de Berk. Fue estrenado el 21 de noviembre del 2012 en EUA y el 15 de abril del 2013 en L.A.
Trama[]
Resultó que Heather robó el Manual de Dragones y se lo trajo a Alvin el Traidor. Por eso Hipo y sus amigos se preparan para ir a recuperarlo.
Sinopsis[]
El episodio comienza con Heather corriendo por el bosque, pareciendo tratar de escapar de algo. Se acerca rápidamente a un barco, pero antes de que pueda alcanzarlo, se prende en llamas después de haber sido disparado por Tormenta y Astrid, quienes la seguían de cerca. La escena luego cambia a una prisión, donde Heather vuelve a ser arrojada a una celda, cuya puerta se cierra rápidamente detrás de ella. Astrid le dice a través de los barrotes de la celda que puede escaparse cuantas veces quiera, pero que nunca podrá abandonar la isla, implicando que ella ya se ha escapado de la celda muchas veces antes. Heather protesta, tratando de decirle algo sobre sus padres, pero Astrid la detiene, preguntándole irónicamente qué pasó con su historia sobre los piratas. Heather admite que inventó esa historia, pero antes de que pueda decir algo más, Astrid se va.
La escena se traslada a la Isla de los Marginados, donde algunos de los hombres de Alvin confrontan a un Gronckle salvaje, que aparentemente protege al Manual de Dragones. Uno de los soldados reflexiona sobre las maneras de conseguir el libro, y discute sus ideas con otro soldado. El otro marginado, aparentemente poco inteligente, sugiere conseguir el libro para ayudarlos, sólo para enterarse de que intentan conseguir el libro del Gronckle. El primer soldado lo convence de intentar agarrar el libro, diciendo que aprendieron que los Gronckles son muy gentiles. Como para probar su punto, el Gronckle no parece ser peligroso, ya que ya que parece rascarse un punto en su barbilla, y mostrando unos grandes ojos como de perrito. El segundo soldado, convencido, se acerca lentamente, pero antes de que pueda agarrar el libro, el Gronckle lo pisa y le gruñe, antes de atacar. Qué pasó no se muestra, pero es seguro que ambos soldados salieron gravemente quemados. El primer soldado se desanima, pero intenta tomar el libro por su cuenta, recibiendo la misma respuesta del Gronckle.
De vuelta en la Academia de Dragones, los jinetes entrenan a sus dragones para preparase para una misión para recuperar el Manual de Dragones de Alvin el Traidor. Patapez y Gordontúa trabajan en su técnica, con la ayuda de Patán. Patán usa una pequeña catapulta para lanzarles rocas, y Gordontúa la atrapa, comiéndosela. Patapez se queja de que el tiro fue demasiado cerca, y los dos comienzan a discutir. Hipo liego intenta detenerlos, pero señala severamente a Patapez, diciendo que sólo tienen una oportunidad de recuperar el libro. Durante el entrenamiento, Dientepúa se inquieta, y se prende en llamas. Patán se apresura y pone los cuernos de Dientepúa contra el suelo. El dragón se desploma y parece calmarse al instante. Patán le explica al resto que a Dientepúa le gusta tener sus cuernos contra el suelo, y Brutacio parece especialmente sorprendido por esto. Brutilda luego dice que a Brutacio también le gusta tener sus cuernos contra el suelo, y lo taclea, realizando una maniobra parecida con su casco. Curiosamente, Brutacio parece disfrutar esto, probando que su declaración es verdadera. Patapez les dice a todos que todo ese entrenamiento será bueno cuando tengan el libro, pero Alvin no se los dará así como así. Astrid se acerca y les dice que ella podría hacerse pasar por Heather, causando que Patapez le pregunte si ha estado comiendo hierba de dragón (esto implica que la hierba tenga un efecto distinto en los humanos, haciendo que actúen irracionalmente). Astrid reacciona rápidamente, golpeándolo en el estómago, y Patapez se queja, preguntándole por qué siempre tiene que ser tan violenta. Astrid le responde que el golpe no fue violencia, fue comunicación. después de que Astrid confirma su plan a Hipo Patapez afirma otra vez que Astid comió hierba de dragón, y Astrid lo golpea en el estómago de nuevo.
La escena cambia a la noche, donde los entrenadores esperan frente a un bote. Patapez parece estar muy nervioso, preocupado de que su plan tal vez no funcione, y comienza a entrar en pánico, pero Hipo con calma le asegura que su estrategia funcionará. Después de que dice esto, Heather aparece por el bosque, y los gemelos reaccionan con hostilidad. Sin embargo, ella golpea a los gemelos y luego habla, y luego se dan cuenta de que en realidad es Astrid disfrazada. Ella se sube al bote y comienza a navegar hacia la Isla de Los Marginados, con Hipo diciéndole que tenga cuidado, en un tono de disculpa, posiblemente todavía sintiéndose culpable por no haberle creído cuando ella le dijo que la verdadera Heather era una espía.
De vuelta en la prisión de Berk, Cubeta le da su comida a Heather. Luego se da cuenta de que se fue, y abre la puerta de la celda, preocupándose porque otra vez dejó escapar a un prisionero. Sin embargo, la escena muestra que ella no se fue de la celda, está aferrada al techo. Ella ataca a Cubeta, y sale de la celda, encerrándolo dentro, disculpándose diciendo que tiene que salvar a sus padres.
En la Isla de los Marginados, Astrid comienza a acercarse a la orilla, pero se ve obligada a agacharse rápidamente en su bote para evitar ser atacada por un Pesadilla Monstruosa salvaje que pasa volando. El dragón sigue volando pero sus acciones pronto revela que los dragones de la isla son hostiles. Ella se baja en la isla, y es recibida por Salvaje, quien dice que él pensó que fue capturada. Ella le dice en voz alta que se escapó, tratando de hacer que su voz suene como la de Heather. Ella se sobresaltó cuando Salvaje le ordena a los Marginados deshacerse de ella, diciendo que ya no la necesitaban más. Astrid luego intenta convencerlo de que aún la necesitan, diciendo que el libro es útil pero sólo cuando uno sabe cómo usarlo, y apoyando su declaración diciendo que ella ha estado entre los Hooligans Peludos y ha visto cómo trabajan con los dragones. Luego, Salvaje lee la sección del Manual sobre los Mortíferos Nadders, y envía a un soldado a intentar entrenar a uno apelando a su vanidad. Se aproxima al dragón y comienza a elogiarlo torpemente. En un principio lo elogia diciéndole que es una chica hermosa, pero luego comienza a dudar sobre su género, preguntándole si es realmente un chico guapo, indicando que no se puede decidir. Esto insulta al Nadder y lo ataca. Salvaje luego accede a dejar que Heather asista a los Marginados en el entrenamiento de dragones.
Mientras tanto, Heather despierta a Tormenta, que estaba dormida, y la sorprende, evitando por poco ser herida por una lluvia de espinas. Sin embargo, una vez más, se gana exitosamente la confianza del dragón y la roba, diciendo que va a encontrar a Astrid. Tormenta reconoce el nombre de su jinete y rápidamente vuela hacia la Isla de los Marginados (esto implica que Heather ha estado al tanto del plan de los vikingos para recuperar el Manual de Dragones.
De vuelta en el territorio marginado, Astrid (disfrazada como Heather) trata de probarle a Alvin que ella es capaz de controlar a los dragones. Alvin la tira en una Arena similar a la Academia de Berk, donde se le soltará un dragón salvaje para que lo entrene. Astrid se para en frente de una puerta cerrada, esperando que le toque un Mortífero Nadder. Desafortunadamente, el dragón que le toca es un Pesadilla Monstruosa rosa y verde oliva. Astrid, molesta, murmura que nunca pensó que alguna vez desearía que Pata estuviera presente. Luego hace varios intentos por entrenar al Pesadilla, pero debido a que usaba tácticas de entrenamiento para Nadders (nunca pararse directamente frente a su nariz y acercarse precavidamente a la cola), falla en todos sus intentos. Sin embargo, antes de que el dragón pudiera dañarla gravemente, ella recuerda cuando Patán dijo que Dientepúa, su Pesadilla Monstruosa, le gustaba tener los cuernos contra el suelo. Ella sigue la misma técnica y esta vez, tiene éxito al entrenar al Pesadilla, quien luego la respeta y sigue todas sus órdenes. Ella inmediatamente toma el Manual y hace el intento de salir de la isla en el dragón, pero Alvin la detiene, preguntándole si iba a abandonar a sus padres allí. Astrid luego se da cuenta de que los padres de Heather fueron capturados de verdad, y que fueron usados para chantajearla y hacer que robe el libro. Alvin le dice que los dejará ir si le da el libro, pero si se va con él, los matará. Alvin envía a los padres de Heather, y Astrid corre hacia ellos gritando "¡Mamá!, ¡Papá!" antes de abrazarlos. Ellos están temporalmente confundidos, conscientes de que ella no es su verdadera hija, pero Astrid les explica rápidamente en voz baja que ella es amiga de Heather, y que ha venido a ayudar. Astrid se apresura a decirles que se tiren al suelo cuando se los ordene. Ella luego se voltea hacia la Pesadilla, y se disculpa, antes de golpearlo en el hocico, enfureciéndolo. El dragón se enciende y lanza una bola de fuego, pero Astrid y los padres de Heather se escabulle, y el dragón vuela por sobre ellos, casi golpeando a Alvin y sus hombres. Astrid y los padres de Heather tratan de correr lejos, pero el plan falla, y Alvin agarra a Astrid por el pelo. Él luego se da cuenta de que algo no anda bien, al encontrar en su mano una marca de aceite al retirar su mano, revelando que el verdadero color del pelo de Astrid no es negro.
Mientras tanto, se muestra que Hipo y el resto están esperando en un bosque quemado por Astrid con creciente ansiedad. Patapez comienza a entrar en pánico, diciendo que ya está muy retrasada, pero Hipo le vuelve a asegurar que vendrá, porque ella es Astrid. Astrid finalmente llega con los padres de Heather, e Hipo vuela en Chimuelo, con los demás por detrás. Cuando aterrizan, en un principio los padres de Heather se asustan del Furia Nocturna, e Hipo está confundido, pero Astrid le explica que los padres de Heather eran prisioneros de Alvin. Justo cuando Hipo sugiere irse, Alvin y sus hombres los rodean, y Alvin dice que no está sorprendido de que Hipo viniera. Los dos intercambian algunos insultos, antes de que Hipo diera una señal y los otros entrenadores se revelaran.
Los entrenadores y sus dragones comienzan a combatir a los Marginados. Desafortunadamente, hay demasiados guerreros, y lentamente comienzan a perder. Algunos dragones son enredados con redes y cuerdas, e incluso ni siquiera el fuego de Chimuelo puede romper los escudos de los marginados. Sin embargo, justo cuando parecía que no podrían derrotar a todos los soldados, Heather y Tormenta llegan para ayudarlos. Pronto los adolescentes comienzan a llevar a cabo su plan, usando lo que aprendieron durante el entrenamiento. Gordontúa se come las piedras que le lanzan, y las devuelve como bolas de fuego derretidas, destruyendo las catapultas de los marginados, y Patán usa a Dientepúa para encender las espinas de Tormenta, haciendo que sean como flechas en llamas. Alvin se pone furioso, y le ordena a sus hombres que derriben a los entrenadores con las catapultas que aún les quedan. Un ataque golpea a Astrid, y ella se cae del lomo de Tormenta. Alvin luego la agarra y se la lleva, siendo Hipo el único que puede atraparlo. Eventualmente, Alvin queda acorralado al borde de un acantilado, y amenaza con tirar a Astrid al océano si Hipo no se rinde. Sin embargo, el Pesadilla Monstruosa rosa y verde oliva que Astrid entrenó viene a ayudarla, y juntos los adolescentes vuelan seguramente hacia Berk, habiendo logrado recuperar el libro. Alvin, viendo con qué facilidad un dragón se unió a su jinete, decidió dejar de ir tras el libro, y en su lugar ir tras Hipo, con una sonrisa siniestra extendida en su rostro.
De vuelta en Berk, Heather y sus padres abordan un barco para navegar de vuelta a su hogar, y los adolescentes se disculpan por no haberle creído. Heather luego les dice que está todo bien, ya que hubiera tenido problemas para creerse a sí misma. Ella le agradece a todos por su ayuda, en especial a Astrid. Hipo también le dice que si alguna ves necesita ayuda, puede llamarlos, y ella le promete que lo hará. Con esto, el barco comienza a navegar, con Heather mirando a los adolescentes despidiéndose de ella. Patán se muestra alejado del resto, y hace una expresión de escribir en su mano, pidiéndole que le escriba. Heahter niega con la cabeza, con una sonrisa en su cara, negándose gentilmente. Finalmente, Hipo finaliza el capítulo narrando que desde que los dragones aparecieron en Berk, han aprendido a esperar lo inesperado, pero que a veces viene algo o alguien que te sorprende, y terminas odiando el momento en que se va.
Eventos importantes[]
- Se recupera el Manual de Dragones.
- A partir de ahora Heather es una aliada de Berk.
Curiosidades[]
- Se muestra que Astrid es más fuerte que los gemelos juntos (demostrado cuando los golpea en el suelo).
- Los padres de Heather son extras de fondo de Berk Re coloreados.
- La Isla de los Marginados es más chica que Berk. De hecho parece un islote.
- Los Marginados tienen su propia versión de la Arena de Berk, aunque con un diseño mucho más tosco.
- Patán ha hecho su primer interesante y útil descubrimiento sobre los Pesadilla Monstruosa; pueden ser calmados instantáneamente al colocar sus cuernos contra el suelo.
- La opinión de Alvin sobre hipo ha cambiado drásticamente. La primera vez que lo conoció se refirió a él como la pequeña vergüenza de Estoico, mientras que en este episodio intentó convencerlo de unirse a él para conquistar el mundo con los dragones.
- Este episodio descarta todas las posibilidades de que los Marginados no son una tribu amante de la guerra. Si bien ya existían fuertes indicios de que los Marginados eran una tribu guerrera (como lo dicen sus barcos con una calavera al frente), el plan maestro de Alvin lo confirma.
Errores[]
- Cuando Hipo y el resto embosca a Alvin, el Manual de Dragones se encuentra en el pantalón de Alvin, pero en la siguiente escena, el Manual está en su cinturón.
Galería[]
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